Nada
Sentado en el bordillo, mirando ajeno al mundo. Todo vive alrededor, pasan rápido, lento, corriendo, andando... no existes. Solo luces cuando te necesitan, no brillas, no destacas, no apareces. La cueva es cómoda y te atrapa. Te sientes a gusto en esa oscuridad. No te atreves, ¿miedo?¿tristeza?¿pereza? Soledad. Hielo, frío... es tu mundo, y ahora tu vida ¿para siempre? No lo sé, ¿tu destino? Es posible. Los huesos te absorben... ansiedad. La suerte no se la espera, la cordura intacta. Lo que hay es lo de siempre. El placer lo buscas, el rosa lo lloras. La experiencia te debilita: no te moldea, te deforma. Te acuestas, te levantas, te acuestas, te levantas. Tu compañía eres tú y solo deseas que, por lo menos, no pase nada más...
Oct. 2020
Comentarios
Publicar un comentario